sábado, 30 de abril de 2011

La solidaridad y la confianza tiradas al tacho

No suelo tratar temas de actualidad acá en el blog pero necesito hacer catarsis de la decepción que tengo.
Hace algunos meses nos enteramos a través de Facebook de que había una familia que necesitaba una importante suma de dinero para llevar al hijo mayor a Estados Unidos a tratarse por una enfermedad degenerativa. La noticia estalló después en todos los medios y nos fuimos enterando de que los hermanos también tenían la enfermedad. Conmovidos por una situación tan tremenda, muchos colaboramos, sin dejarnos llevar por prejuicios sobre, por ejemplo, el doble apellido de la familia y, felizmente, se logró recaudar el dinero necesario.
Pero resulta que el ejemplar padre de familia no lo es tanto. Hoy nos enteramos de que anoche tuvo un confuso episodio en su auto Vento con una chica que trabaja en una whiskería de Carlos Paz.
Y ahora es donde me surgen varios interrogantes. ¿No sería más coherente que el logro del objetivo lo hubiera festejado con la familia? ¿No se le ocurrió vender el auto para juntar un poco más de plata sin depender enteramente de la colaboración de la gente? ¿La esposa sería una simple cornuda o formaría parte del circo de familia unida necesario para conquistar los bolsillos y cuentas bancarias de personas con mucho o poco poder adquisitivo? ¿Las demás personas que colaboraron se sentirán tan pelotudas como yo?
Lo que espero, sinceramente, es que todo esto no afecte la sensibilidad que tenemos como sociedad hacia estos casos. Sería una gran pena.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

que hdp el tipo!

Un Poco Rara dijo...

Un garca importante, sí.
Lo que más rabia me da es que los hijos pueden terminar pagando las consecuencias, porque todavía hay que operar a los otros dos.
No dudo del diagnóstico, como muchos ahora, porque fue confirmado por los médicos del Garrahan.
Lamentable.

YoFran dijo...

Yo no diria que es solo un garca. Creo que en realidad es un estupido porque no midio ninguna consecuencia.

Hubiera preferido un garca inteligente que guarda disimulo y no deja que nada salga a la luz a este estupido que le arruino la credibilidad a su causa restandole chances a sus hijos.

Un Poco Rara dijo...

Sí, un estúpido, un soberbio y un incoherente.
Yo hubiera preferido que festejara con la familia cuando los tres chicos estuvieran sanos, y no con un gato cuando recién van a viajar y todavía falta lo peor, que es el tratamiento.