Más migraña que nunca

Una ventaja de trabajar en una empresa con clientes en el gran país del norte es que los feriados de allá acá son hábiles, y entonces los podés aprovechar para ponerte al día con todos esos trámites que venías pateando por no levantarte temprano una vez cada tanto. Pero cuidado! Ponerte al día no quiere decir necesariamente resolver.


LUZ:

Me venía llegando una boleta de $22 y de golpe me fajaron $150. Hice el reclamo y me dijeron que en 1 mes iba a estar la resolución. Sí, TREINTA DÍAS. En sulky deben andar. Y obvio que tuve que pagar los $150, total si hay un error después me reintegran pero mientras tanto manejan mi plata como se les canta.
La fecha indicada era justo hoy, así que fui plenamente convencida de volverme con más platita en mi billetera. De nuevo: 1 mes.
Después de esperar 1 hora me encontré con una de las actitudes más comecriollos de las que haya sido triste testigo:

Maldito empleado comecriollos -No, ta pendiente.
UPR -Cómo que pendiente?
MEC -Qué dice ahí? -señalando una línea particular en mi hojita A4 y tratándome como analfabeta.
UPR -Fecha estimada -respondo con cara de "me estás jodiendo?" - pero esto fue hace 1 mes...
MEC -De nuevo, qué dice ahí? Iame al 0800.
UPR -Llamé antes de venir. Me dijeron que ellos no lo pueden resolver, que el trámite se hace personalmente.
MEC -Naa, insista.
UPR -Bueh... manejen mi tiempo como les parezca.


PASAPORTE:

La mentirosa web de correo privado que todavía funciona como público indicaba que el cartero había tenido 3 intentos fallidos de entregarme mi pasaporte. Eso o algún infeliz puso mal alguna letra y mis notificaciones pasaron por debajo de alguna puerta que no es la mía.
Me apersoné otra vez en la oficina correspondiente y, tras sortear la enorme cola de gente que se levanta más temprano para buscar un decodificador que para buscar un trabajo (y no me salten con que soy facha porque les aseguro que ahí no vi ninguna viejita indefensa), me di con que el envío volvió a Buenos Aires, así, sin más. No entiendo para qué te piden un teléfono, por ejemplo.
Ahora resulta que tengo que esperar 2 semanas más, pero lo bueno es que me dieron un teléfono. Gracias che, son re piolas.


DNI:

El cartero de correo privado con logo violeta me había dejado una notificación avisando que mi DNI ya estaba listo. La notificación también decía que antes de ir a las oficinas de correo postal violeta llamara por teléfono. Una odisea de 2 días hasta que me pude comunicar porque parece que hasta los argentinos radicados en Burundi estaban ansiosos por hacerse de la nueva libretita celeste. Me dijeron que tenía que esperar 3 visitas del cartero y después de eso el envío volvía a esa sede. Esperé pero ninguna nueva notificación apareció, descontando la dificultad de coincidir en tiempo y lugar con el cartero, así que ya que tenía tiempo fui a ver qué onda.
Obviamente, mi DNI ya no estaba ahí.
Por suerte seguirle el rastro no fue tan difícil. Tuve que volver al registro civil del centro, donde había hecho el trámite, y ahí sí, finalmente, me encontré con el kit de libreta furiosamente celeste y tarjetita símil cédula federal. Aleluya!