Una compañera de trabajo llegó de viaje por Europa confirmando que la mala onda de los parisinos no es ningún mito.
Igual, mi solidaridad hacia ellos. Si yo viviera en una ciudad atestada todo el año de mamertos acarreando tiras de pan como si fueran manjares y queriendo sacarle fotos a cada pedacito de vereda porque suponen que es glamorosa o no sé qué, también estaría hinchada de las pelotas.
Tengan esto en cuenta, amigos parisinos, y tratenmé bien cuando vaya, algún día...
miércoles, 27 de julio de 2011
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7 comentarios:
Yo nunca fui a New York, no sé lo que es París, vivo bajo la tierra... gracias que tengo la parabólica de directv :)
Saludo
Jaja. No, yo tampoco. Pero aunque sea con los compañeros del hogar de día, voy a ir.
Hogar de día?? Vos sos más divertida que yo.. eso NO PUEDE SER!!
Ya te contaré cómo son los parisinos, el próximo lunes estaré ahí...El que me pellizque liga un sopapo; si es un sueño, no quiero saberlo!
Sandra: es mi blog, más vale que tengo que ser la más divertida. Así que ojito!
Anónimo: Oh por Diorrrrrr!!!! Te envidio, y no sanamente, sabelo. Traeme una baguette. La rallo y hago milanesas.
Y firmá! Responder a un anónimo es como responderle al aire.
Buen viaje!!
Concuerdo plenamente.
Más ahora, que los franchutes creen que el Cabo Polonio es Nueva Guinea
y vienen como locos a no poder usar el teléfono, ni el notebook, ni nada.
Lugares inhóspitos si los hay. Ni una sombra...y tiene un misticismo...
jajaj
Menos mal que todavía no saben lo que es Valizas.
Abrazo cómplice.
Nicus
No conozco ni Cabo Polonio ni Nueva Guinea ni Valizas. Cuando vaya te cuento ;)
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