Lo mejor de los cumpleaños suele ser el autorregalo. Este año no fue la excepción.
No fue una prenda de esas que pocas veces te animás a ponerte. No fue algo lindo y caro que comprás como un lujo. No fue algo que hacía tiempo tenía ganas de comprarme. Me regalé un permiso nomás. Y lo aproveché. Y me encantó.
Salud! Por los permisos. Salud! Por los autorregalos.
viernes, 28 de agosto de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
5 comentarios:
TE FALTO UN DETALLE .. PERMISO PARA QUE ? ...
AH PERDON .. SALUD !!!
Chin chin amiga!
Digamos que era algo que me debía, ja.
picarona!!!
;)
Publicar un comentario