Primera hora de un lunes en la sala de espera de un sanatorio a punto de entrar a hacerte un PAP no es la mejor manera de empezar la semana, pero siempre puede ser peor. Si la ventana del consultorio de tu médico tiene cortinas y no está rodeada de edificios, no te quejes. Yo no tuve esa suerte.
Hasta el año que viene no me toca de nuevo, pero creo que, por solidaridad con el género, le voy a donar al doc un lindo papel afiche.
martes, 22 de diciembre de 2009
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9 comentarios:
jajajaja! abrite al mundo bays!
o una cortina al doc, o unos largavistas a los vecinos de enfrente, pero que esto no quede a medias tintas...
Iván: bueno, sí, pero tampoco el extremo!!
S·A·L: imaginate que a esta altura ya los deben tener! Igual, con mi suerte, seguro son vecinas.
Simpre que estuve en esa posición me preguntaba si podía haber algo más incómodo... nunca pensé en el factor no-cortinas.
Nunca hay que preguntarse cuán peor puede resultar.
Viste Ushka? Sieeeeempre se pude estar peor.
Tenelo en cuenta y no retes al destino. Le encanta demostrar que es así.
Abrirse a los demás. que le dicen.
Algo así PM, pero no tan literal!!
ENTENDí BIEN? NO HABíA CORTINAS????
No Naida, no había.
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